Un grave hecho de corrupción develó la Fiscalía tras confirmar que siete policías, adscritos a la estación del barrio Laureles de Medellín, fueron capturados por presuntamente quedarse con un dinero de una persona capturada por enriquecimiento ilícito, en hechos ocurridos el pasado 23 de enero.
Entre los siete policías hay un subintendente y un intendente, el resto son patrulleros. Los uniformados habrían capturado a un ciudadano que fue sorprendido movilizándose con $300 millones en efectivo. Sin embargo, al momento de reportar este hecho a sus superiores, dijeron que le habían encontrado $275 millones, es decir, se habrían quedado con $25 millones.
Según la investigación, el sujeto capturado no logró demostrar la legalidad de la alta suma de dinero, pero reconoció que se desplazaba con $300 millones, lo que hizo sospechar a los expertos de la Dijín. Días después establecieron que una de las policías capturadas intentó sobornar a un superior para que ocultara información.
Un juez de control de garantías envió a cuatro de los agentes a prisión de manera preventiva. Los otros tres tienen medida de aseguramiento domiciliario mientras avanza el proceso.
Entre los siete policías hay un subintendente y un intendente, el resto son patrulleros. Los uniformados habrían capturado a un ciudadano que fue sorprendido movilizándose con $300 millones en efectivo. Sin embargo, al momento de reportar este hecho a sus superiores, dijeron que le habían encontrado $275 millones, es decir, se habrían quedado con $25 millones.
Según la investigación, el sujeto capturado no logró demostrar la legalidad de la alta suma de dinero, pero reconoció que se desplazaba con $300 millones, lo que hizo sospechar a los expertos de la Dijín. Días después establecieron que una de las policías capturadas intentó sobornar a un superior para que ocultara información.
Un juez de control de garantías envió a cuatro de los agentes a prisión de manera preventiva. Los otros tres tienen medida de aseguramiento domiciliario mientras avanza el proceso.