Como una “falta de respeto” y un “show mediático” calificaron varias organizaciones de víctimas las declaraciones del expresidente Álvaro Uribe Vélez sobre los falsos positivos ante la Comisión de la Verdad. La reunión, que se llevó a cabo en su finca ubicada en Rionegro, se dio en medio de una audiencia libre transmitida en vivo.
Recordemos que el expresidente aseguró que los “soldados lo engañaron” y negó que desde su administración hayan promovido estas prácticas que cobraron la vida de más de 6.400 personas, principalmente jóvenes campesinos engañados con falsas promesas laborales para ser llevados a sitios donde fueron asesinados y luego presentados como guerrilleros muertos en combate.
Para las víctimas, el expresidente Álvaro Uribe no demostró estar arrepentido ni mucho menos comprometido con la verdad. Aseguraron que las declaraciones parecían ser sacadas de un libreto redactado por sus asesores.
“Uribe no pidió perdón, no se mostró arrepentido, tampoco se dejó contrapreguntar. Solo se dedicó a defenderse, a echarle la culpa a los soldados y a negar cualquier instrucción desde el gobierno, pero todos sabemos quién dio la orden”, dijo Marta Cardozo, madre de uno de los jóvenes asesinados.
En la audiencia libre Uribe aseguró que no reconoce la legitimidad de la Comisión de la Verdad ni de ninguna institución creada por los acuerdos de paz entre el gobierno de Santos y las Farc, pero dijo que accedió a entregar su versión por el respeto que siente hacia el padre Francisco de Roux.
Las familias de las víctimas le exigieron respeto al expresidente y lamentaron que la transmisión haya servido de plataforma para que Uribe presuntamente volteara la atención hacia los soldados y no hacia su gobierno y las directrices dadas.
Recordemos que el expresidente aseguró que los “soldados lo engañaron” y negó que desde su administración hayan promovido estas prácticas que cobraron la vida de más de 6.400 personas, principalmente jóvenes campesinos engañados con falsas promesas laborales para ser llevados a sitios donde fueron asesinados y luego presentados como guerrilleros muertos en combate.
Para las víctimas, el expresidente Álvaro Uribe no demostró estar arrepentido ni mucho menos comprometido con la verdad. Aseguraron que las declaraciones parecían ser sacadas de un libreto redactado por sus asesores.
“Uribe no pidió perdón, no se mostró arrepentido, tampoco se dejó contrapreguntar. Solo se dedicó a defenderse, a echarle la culpa a los soldados y a negar cualquier instrucción desde el gobierno, pero todos sabemos quién dio la orden”, dijo Marta Cardozo, madre de uno de los jóvenes asesinados.
En la audiencia libre Uribe aseguró que no reconoce la legitimidad de la Comisión de la Verdad ni de ninguna institución creada por los acuerdos de paz entre el gobierno de Santos y las Farc, pero dijo que accedió a entregar su versión por el respeto que siente hacia el padre Francisco de Roux.
Las familias de las víctimas le exigieron respeto al expresidente y lamentaron que la transmisión haya servido de plataforma para que Uribe presuntamente volteara la atención hacia los soldados y no hacia su gobierno y las directrices dadas.