¿Se imaginan lo difícil que es para una mujer afrontar el período menstrual estando en prisión? Decenas de mujeres recluidas en la cárcel El Pedregal de Medellín denunciaron que desde el inicio de la pandemia han tenido más problemas de lo normal para acceder a los productos de aseo.
Por eso, en un encuentro que se extendió por varias horas, profesionales de la alcaldía y mujeres privadas de la libertad en el centro penitenciario El Pedregal dialogaron sobre alternativas de salud menstrual y los mitos que se les han impuesto, y que a su vez les impiden vivir una menstruación libre y sin prejuicios.
“Sabemos que la experiencia menstrual de las mujeres en situación de privación de la libertad es compleja. La garantía del derecho de las mujeres a la salud menstrual llega precisamente hasta este lugar con información y la entrega de insumos que pretenden transformar prejuicios y barreras”, afirmó la asesora de salud menstrual de la Secretaría de las Mujeres, Carolina Ramírez.
En estos encuentros, más de 200 reclusas recibieron copas menstruales y toallas higiénicas reutilizables. Al tiempo, expresaron las situaciones que enfrentan con relación al acceso a insumos y medicamentos para la gestión de la menstruación.
El subdirector de la sección mujeres del Pedregal, Juan Carlos Yepes, valoró el ingreso de los insumos reutilizables y celebró que estas acciones lleguen al centro penitenciario de manera diferenciada.
Por eso, en un encuentro que se extendió por varias horas, profesionales de la alcaldía y mujeres privadas de la libertad en el centro penitenciario El Pedregal dialogaron sobre alternativas de salud menstrual y los mitos que se les han impuesto, y que a su vez les impiden vivir una menstruación libre y sin prejuicios.
“Sabemos que la experiencia menstrual de las mujeres en situación de privación de la libertad es compleja. La garantía del derecho de las mujeres a la salud menstrual llega precisamente hasta este lugar con información y la entrega de insumos que pretenden transformar prejuicios y barreras”, afirmó la asesora de salud menstrual de la Secretaría de las Mujeres, Carolina Ramírez.
En estos encuentros, más de 200 reclusas recibieron copas menstruales y toallas higiénicas reutilizables. Al tiempo, expresaron las situaciones que enfrentan con relación al acceso a insumos y medicamentos para la gestión de la menstruación.
El subdirector de la sección mujeres del Pedregal, Juan Carlos Yepes, valoró el ingreso de los insumos reutilizables y celebró que estas acciones lleguen al centro penitenciario de manera diferenciada.