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Los ciudadanos estadounidenses, han alzado sus voces desde el 27 de mayo tras el asesinato de George Floyd, las protestas se han extendido en 140 ciudades incluyendo Washington, capital del país donde los disturbios han sido tan severos, que la Casa Blanca se vio obligada a apagar sus luces del exterior por primera vez e ingresar al presidente en el bunker por protección.
La policía tuvo que utilizar gases lacrimógenos para disuadir las protestas, que llegaron cerca de la residencia del presidente Donald Trump y en los sectores aledaños, pues hubo daños a edificios, automóviles volcados e incendios, incluyendo uno cercano al Monumento a George Washington.
El hecho que detonó la situación, fue el incendio presuntamente provocado a la histórica iglesia de Saint John, que queda justo frente al edificio residencial. Este se sofocó rápidamente ante la llegada del cuerpo de bomberos de Washington, que logró tomar el control.
La Guardia Nacional de los Estados Unidos, ha sido desplegada en los 21 estados que más presentan protestas, esto con el fin de evitar el caos. Sin embargo, las manifestaciones se han extendido en los 50 estados que conforman todo el país.